Tubos Aranda Villa de Aranda está sorprendiendo en su regreso a la élite del balonmano masculino a nivel de clubes tras firmar una primera vuelta que invita a soñar con la permanencia. Los arandinos coleccionan 12 puntos en su casillero y exhiben el orgullo que supone para Aranda de Duero volver a ser uno de los territorios ASOBAL. El Santiago Manguán es el templo en el que se reúnen, jornada tras jornada, los fieles del balonmano con el sello de excelencia de la Liga Plenitude. El líder del proyecto arandino, Javi Márquez, comparte con ASOBAL su valoración de la temporada que está viviendo Tubos Aranda Villa de Aranda.
¿Te esperabas acabar la primera vuelta con 12 puntos en el casillero de Tubos Aranda Villa de Aranda y con un colchón de +6 con el descenso directo que marca Guadalajara?
Para nosotros, terminar con 12 puntos la primera vuelta es increíble. Al equipo le costó arrancar, pero luego hemos sido capaces de conseguir victorias en casa y fuera que nos dejan estar con ese pequeño colchón de seis puntos, que seguramente ninguno de nosotros nos planteábamos al inicio de la temporada pero que es bienvenido. Lo importante es que somos conscientes de que en la segunda vuelta todavía queda mucho por discernir y que vamos a tener que hacerlo muy bien o repetir lo hecho en la primera vuelta para poder salvarnos.
¿Qué te parece que muchos aficionados sitúen a Tubos Aranda Villa de Aranda como uno de los equipos revelación de la Liga Plenitude?
Creo que los títulos hay que darlos al final de temporada. Que ahora mismo pensemos en si somos equipo revelación o no, no tendría ningún sentido. Al final de curso veremos si somos capaces de consolidar esa permanencia. Entonces pondremos las notas.
¿Tu objetivo como entrenador es que los jugadores vuelvan a conectarse a la competición sin confiarse pensando que el trabajo de cara a la salvación está encaminado?
La relajación en los jugadores o en todos los estamentos que conformamos el Villa de Aranda sería mala. Es importante conectarnos a la competición, tenemos un inicio complicado de calendario en la segunda vuelta con partidos muy difíciles. Vamos a tener que estar a un buen nivel para intentar conseguir cosas. Esta pretemporada, con cuatro partidos amistosos, era para coger ritmo competitivo lo antes posible.
¿La clave de vuestra exitosa primera vuelta es haber hecho los deberes ante los rivales directos por la permanencia?
Sí, dentro de las victorias conseguidas, haber ganado a Huesca y Guadalajara en su casa y a Anaitasuna y Benidorm en Aranda es importante, pero, como siempre, tenemos que refrendarlo en la segunda vuelta, al igual que la derrota que sufrimos en Cangas y que ahora los recibiremos en casa. Será un partido de máxima dificultad y deberíamos hacer los deberes.
Al equipo le costó arrancar ya que la primera victoria en ASOBAL no llegó hasta la Jornada 6 y el primer triunfo en casa hasta la 9. ¿Fue complicada la adaptación de los jugadores a la nueva categoría?
El inicio fue complicado no sólo por la adaptación a la categoría y porque había trece jugadores en plantilla que debutaban en ASOBAL sino porque también el calendario era muy exigente. Curiosamente, fuimos capaces de puntuar en la primera jornada frente a Bidasoa Irun, pero luego tuvimos partidos frente a equipos de la zona alta de la tabla que no fuimos capaces de puntuar. Eso ya pasó, lo importante es que los jugadores se han adaptado y, en la segunda vuelta, siendo conscientes de la dificultad, necesitamos seguir a un muy buen nivel para seguir puntuando.
¿Cómo estás viviendo tu segunda experiencia en la élite después de entrenar a Cisne en ASOBAL?
Esta segunda temporada es diferente a aquella en Cisne porque tuvimos muchísimos problemas con las lesiones, no fuimos capaces de tener a todos los jugadores a disposición en toda la temporada, y eso marcó considerablemente el curso. El equipo fue competitivo. La situación ahora es diferente porque los dos equipos también lo son. El Santiago Manguán juega un papel importante en cuanto a meter presión a los rivales, los partidos en casa nos dan un extra de motivación para conseguir puntuar.
Cuando empiezas la temporada, ¿te fijas una puntuación que crees que supondrá la salvación o es la lucha por la permanencia más abierta de los últimos años y es difícil hacer cábalas?
Es difícil hacer números y ver dónde está la permanencia. Suelo mirar cómo han sido las últimas temporadas y con qué puntuación se ha descendido y se ha salvado la categoría. No somos visionarios, no sabemos cómo va a ser la competición, si un equipo se va a descolgar pronto o no que no parece este año, eso puede hacer que se modifiquen esas pequeñas cábalas a la hora de definir con cuántos puntos se van a salvar los equipos este año. En este sentido, me tomo las cosas con mucha tranquilidad, me gusta ir día a día y partido a partido y, a partir de ahí, ir viendo y valorando cada situación.
¿Cómo es jugar con el factor Santiago Mangúan a favor?
Jugar en el Santiago Manguán es una auténtica delicia para nosotros y para los rivales. Es cierto que, en el momento de meter presión en partidos importantes, el Santiago Manguán está mostrando una cara increíble durante toda la temporada. No sólo en casa, fuera también hemos estado arropados por muchos aficionados de Villa de Aranda y la verdad es que el sentir que la ciudad tiene con el balonmano, tanto en el pabellón como en el día a día, es increíble. Que un equipo como Villa de Aranda esté en ASOBAL le da un plus de público y de afición que ojalá lo pudiéramos tener en todos los pabellones de España.
La afición de Villa de Aranda es la segunda con mayor presencia en los pabellones, sólo por detrás de Ademar. ¿Se palpa en el ambiente que Aranda de Duero tenía ganas de volver a ser territorio ASOBAL?
Somos la segunda afición con mayor afluencia y también, seguramente, de las aficiones que más visita pabellones rivales. Es importante que podamos seguir con este ambiente y ese apoyo continuo que nos dan nuestros aficionados incluso en días en los que no estamos muy acertados y perdemos los partidos, como ocurrió en Valladolid o frente a Granollers. Tenemos que ser capaces de seguir con ese binomio afición-jugadores que seguramente nos dará opciones de conseguir la permanencia.
Si nos centramos en los nombres propios del equipo destacamos la figura de Dalmau Huix. ¿Cómo valoras su debut en ASOBAL teniendo en cuenta que es el cuarto máximo goleador de la competición con 88 goles?
Dalmau es un jugador con muy buen nivel, que llevaba ya 10 años en Plata y que habla muy bien de la competición tan buena que tenemos y no valoramos. Es una perfecta rampa de lanzamiento para muchos de nuestros jóvenes e incluso para jugadores como Dalmau que, por circunstancias, no ha estado en ningún equipo ASOBAL pero que está demostrando, sobradamente, que tiene cualidades y capacidades suficientes para ello. Ya el año pasado hizo una grandísima temporada y este año sigue a ese nivel.
En la portería, ¿qué supone para Villa de Aranda tener a Pau Guitart que es el cuarto mejor guardameta de ASOBAL con 133 intervenciones?
Pau Guitart fue determinante, el año pasado, en los éxitos deportivos de Villa de Aranda y este año también. Está a un grandísimo nivel, estamos muy contentos con la portería porque Maxym Vyunyk y Javier Teijón también están aportando. El hecho de tener tres porteros, con la competitividad que esto supone, hace que ellos cada día sean más exigentes, que estén entrenando bien.