La aventura del Barça en la EHF Champions League pasa esta tarde por la pista del Porto (18.45h) en el duelo de equipos todavía invictos en esta tercera jornada, citados en un Pavilhao Dragao Arena vestido con sus mejores galas para celebrar el día del 130 aniversario de la fundación del club portugués. En juego, dos puntos y el liderato del grupo B, a la espera del papel de Veszprem y GOG, también con un bagaje de bagaje de dos victorias y ninguna derrota. "Llevan cuatro puntos como nosotros. En estos dos partidos ha habido ratos en los que han ido perdiendo de mucho o con marcador adverso claro y han sido capaces de remontar. Esto dice mucho a su favor. Nosotros tenemos que seguir fundamentando nuestro juego en partir de la defensa, seguir saliendo al contragolpe, ser inteligentes y dominar también el ataque posicional", ha comentado Carlos Ortega.
El conjunto catalán sigue haciéndose fuerte en campo propio. Afronta el choque con el mejor registro defensivo de la máxima competición continental (45 goles encajados), haciendo bueno el equilibrio entre el funcionamiento del sistema 6:0 y el momento de la dupla Gonzalo Pérez de Vargas-Emil Nielsen. "Ellos tienen cuatro puntos y nosotros también. Es un partido de Champions y siempre es difícil. Ellos juegan cosas diferentes en ataque y en defensa, pero nosotros queremos volver a casa con los dos puntos", explica Jonathan Carlsbogard, con la experiencia de haberse enfrentado este curso al Porto durante la disputa de la Supercopa Ibérica, en esa ocasión 38-44.
El conjunto de Carlos Resende ha ido de menos a más desde la pretemporada, superando en Europa al Orlen Wisla Plock (24-23) y Celje (29-30), sin haberse enfrentando todavía a los aparentemente favoritos a llegar a la fase final del Lanxess Arena de Colonia. "Resende está poniendo su impronta. Es un equipo que ahora juega más rápido, hacen el siete contra seis de otra manera, la superioridad numérica de otra manera. El partido de Supercopa Ibérica fue al final de la pretemporada y quizás los dos equipos todavía estábamos con probaturas", insiste Ortega, espantando hipotéticas relajaciones.