Duelo de hermanos Simonet en los 200 partidos en ASOBAL del mayor de la saga

10/05/2019 | FOTO: Víctor Salgado (ASOBAL) Liga Plenitude

El azar ha querido que Sebastián Simonet cumpla hoy (20:30 horas, La8 y LaLigaSportsTV) su duelo número 200 en la Liga ASOBAL enfrentándose a su hermano pequeño Pablo, en las filas de BM. Benidorm, arropado por su familia en las gradas y a pocos días de emprender el viaje de vuelta a Argentina. El partido estará cargado de emoción para el mayor de la saga Simonet que vivirá su último cara a cara con Pablo antes de poner punto y final a una carrera deportiva que ha tenido como escenarios ASOBAL Torrevieja y León, ciudades y clubes antagónicos que han dejado huella en el corazón del central ademarista. El primera línea argentino decidió cruzar el charco en 2006 rumbo a Torrevieja en un auténtico salto al vacío hacia el balonmano profesional: “Cuando llegué a España, mi única preocupación era intentar jugar algún minuto. Me veía muy por debajo del nivel de mis compañeros y sabía que me iba a tener que esforzar y entrenar mucho para ganarme algunos minutos. Con los años gané la confianza de compañeros y del entrenador. Para mí España era una aventura completamente nueva, suponía venir a conocer qué era jugar profesionalmente. No tenía idea de qué iba a pasar y menos de que iba a jugar 200 partidos en la Liga ASOBAL”. Los años en Torrevieja forjaron el carácter de un Sebastián Simonet que regresó a la Liga ASOBAL, tras su experiencia en Ivry, convertido en un auténtico líder y referente para sus compañeros de vestuario. La pasión, la entrega y el liderazgo van intrínsecos al ADN de Simonet, unas señas de identidad que definieron dos etapas tan opuestas como Torrevieja y León: “Las experiencias en Torrevieja y León fueron bastante distintas. Por la ciudad, por el equipo y por todo. Torrevieja era una ciudad de costa con mar y su objetivo era mantenerse en ASOBAL. Yo llegué en una etapa de formación, me tenía que convertir en un jugador de balonmano y no en un tirapiedras como era por aquel entonces. A León llegué ya formado, en mi mejor momento de balonmano, mucho más maduro. León es una ciudad mucho más española y Ademar es un equipo que luchaba por entrar en Europa y que ha jugado Champions. En León tengo mucha más responsabilidad que en Torrevieja. De los dos lugares me llevo recuerdos hermosos”. Para el Simonet que salió de Argentina con 20 años era impensable alcanzar los 200 partidos en la Liga ASOBAL. Trece años después del inicio de su aventura europea, el Gladiador logrará cerrar el círculo de su trayectoria en ASOBAL con una cifra redonda, alentado por los suyos y con su hermano en la pista: “Parece como armado todo. Jugar el partido 200 contra mi hermano, con mis padres en la grada y terminar casi con números redondos una larga y linda trayectoria para mí es como si estuviese todo preparado. Ojalá pueda disfrutar el partido y que ganemos. Queremos regalarle un buen partido a la afición de León, que este año les hemos hecho sufrir más que otra cosa”. En su camino por el viejo continente, Sebastián Simonet se casó con tres equipos y se entregó en los tres proyectos deportivos: “No sé si soy de echar raíces. En los tres clubes europeos en los que pasé estuve muchos años: 3 en Ademar, 5 en Ivry y 5 en Torrevieja. Habla del sentimiento o de la forma en la que me gusta jugar a mí. Yo siento mucho lo que hago. Juego igual todos los partidos. Siento el lugar donde estoy y más si me tratan tan bien como en todos los lugares donde estuve. Uno cuando se acostumbra a esto del deporte profesional sabe que puede estar un año en un sitio y al otro, en otro. Hay jugadores que cambian mucho de país y otros que no. Se dio así por un sentimiento de pertenencia”. Torrevieja y León fueron testigo de multitud de momentos que Seba Simonet guardará para siempre en su retina: “Los mejores momentos serían haber jugado en Champions partidos como el del Wisla Plock en casa esta temporada, la serie frente al Montpellier de Diego o el partido en Granollers que ganamos en el último segundo en León. También me acuerdo mis primeros partidos de titular en Torrevieja, cuando empezaban a salirme las cosas bien. Esos fueron mis momentos cumbre en mi recorrido por ASOBAL. Los peores fueron mi lesión en Torrevieja. Me lesioné al poco de llegar y estuve casi un año entero parado. Fue muy duro. Osé replantearme algunas cosas y por suerte me di cuenta que eran cosas de joven iluso y no dejé por lo que había venido a Europa, que era soñar con ser un jugador profesional”. El director de orquesta, Sebastián Simonet, se despide de la Liga ASOBAL y del balonmano profesional pero aún le restan tres funciones más defendiendo la camiseta de ABANCA Ademar León con el objetivo de situar al equipo ademarista en Europa.