El FC. Barcelona Lassa se impuso ayer por la tarde al CSM Bucuresti (26-33) en una triste jornada en la que el deporte pasó a un segundo plano tras el macabro atentado terrorista perpetrado en Barcelona. En los instantes previos al inicio del encuentro, los pupilos de Xavi Pascual guardaron un emotivo minuto de silencio y, durante el partido, los jugadores lucieron brazaletes negros en memoria y recuerdo de las víctimas. Al homenaje se sumaron, respetuosamente, los integrantes del equipo rumano y también los aficionados que asistieron a la Sala Polivalenta de Bucarest.